c r e o e n l a b e l l e z a . . .
en lo que me haga latir el corazón mas rápido,
o me lo detenga por segundos...
...creo que crear hace que te lo creas...
ultima expo...La obra de Lina Velázquez (Colombia 1970) es un juguito concentrado de la propia artista: intensa, poética, picarísima, ultra-femenina e inolvidable.A la Sala de exposiciones de Mediona nos trajo una historia de amor verdadero en 28 bellísimas imágenes llenas de humor y de esa poesía que el corazón percibe como un flechazo y que la palabra nunca alcanza a expresar.
Los cuadros de Lina, chiquititos, abarcan mucho, y por eso uno se detiene en cada imagen mucho rato. Son cuentos dentro del cuento: paisajes de enigmáticos mensajes y frases gloriosas; sueños lúcidos donde reinan la belleza, la razón poética y la emoción; símbolos que juegan con una imagen, mil palabras y el hilito sutil, que las acopla. Pura lujuria y pura pasión.
Para la inauguración, Lina se propuso hacerse a sí misma, y a todos los que tuvimos la suerte de acudir, un magnífico regalo. Invitó a un grupo de artistas que armaron una velada digna, como se comentó entre los asistentes, de cualquier galería del mundo.
Bailó Montse Morilla arropada por un video-montaje de las obras de Lina como telón de fondo: corazones palpitantes, rosas al rojo vivo, damiselas de otros tiempos suspirando entre caligrafía hilvanada de plata. Una coreografía voluptuosa, sensual, que se fue despertando y acabó en torbellino, arrebato, desgarro; perfecto eco de la mujer inocente y salvaje reflejada en los cuadros de Lina. Del silencio brotó la música de Gerard y sus mágicos instrumentos que suenan a aire de otras tierras, y la danza tierna e intimista de Ayako, que hipnotizó al público con el equilibrio infinito de sus gestos, unos enormes pies de yeso con los que jugaba y el puñado de arena blanca que había esparcido por el suelo. Cerraron el evento los niños que la miraban y que con toda naturalidad respondieron a su invitación de unirse a la performance (espectáculo) y trazar efímeros dibujos en la arena.
Poesía en movimiento, arte para sentir y disfrutar. Un apropiadísimo homenaje a la obra de la artista.
Por Mónica Garrido.
“Una exposición llena de vida, de intensidad de vida. Los cuadros transmiten emociones, te las hacen sentir. El evento fue fantástico, una oportunidad de conocer otros tipos de danza y música y de pensar en lo que uno siente a través del arte.”
“Sensualidad, voluptuosidad, poesía, ingenuidad y atrevimiento, rojo, capricho, atisbos más allá de lo consciente y claro... belleza.”
“Emoción, calidad inspiradora, provocadora, tierna, juguetona... la obra es un guiño, una conexión, reflexión y emoción. Como mujer, conectas. Despierta sensibilidades y es una obra con la que puedes dialogar, que crece contigo. Un placer y un privilegio.”
…un enorme agradecimiento al Ayuntamiento de Mediona por su colaboración y apoyo en este maravilloso evento, la verdad es que el entusiasmo del alcalde nos enterneció a todos....